Una nueva temporada de este grandioso anime, cuyas temporadas, además de contar con una dosis agradable de fanservice, cuentan un historia interesante y oscura. Por ello he de decir que tenía mis expectativas muy altas con respecto a este episodio.
Como todo primer episodio, fue introductorio. Más que nada fue una presentación sobre el personaje de Sebastian. Dar pinceladas de la ya conocida relación entre él mismo y Ciel y de marcar ciertos puntos característicos.
Esencialmente el episodio parece un homenaje o una versión del primer episodio de la primera temporada.Especialmente el conflicto central de este así como su desenlace son parecidos.
Por lo visto esta nueva temporada no tiene continuidad con el final de la segunda. Por mi parte , no tengo punto de comparación ya que no he leído el manga, más acepto que el final de aquella segunda temporada me dejó con gusto amargo. Por lo tanto me alegro de que se comience una nueva historia.
El episodio comienza de forma bastante relajada, y con situaciones cómicas, presentando la superioridad de Sebastian, su capacidad de hacer todo a la perfección y solucionar cada uno de los problemas domésticos que se presentan (además de lograr que nos brillen los ojos de tanta belleza en un mismo personaje *-* ).
Como comentario personal, no recuerdo que fuera tan quejumbroso, había uno que otro comentario, pero no recuerdo que hiciera tantas cosas de mala gana. ¿me falla la memoria?
Además de ese detalle, no parece haber cambiado mucho, no es que fuera un personaje cambiante en emociones ni extremadamente complejo de entender tampoco.
Los sirvientes tampoco han cambiado. Principalmente son la fuente de las situaciones cómicas, que son fáciles de disfrutar. Finny sigue siendo mi predilecto entre estos tres, con esa característica ternura.
Por otro lado Ciel no es el centro del episodio. Tampoco ha cambiado mucho, y solo se marcan ciertos aspectos de él, como su personalidad, su incapacidad para bailar, entre otros.
Argumentalmente el episodio no tiene mucho que ofrecer. Tampoco muestra muchos conflictos a desarrollar. El momento esencial, que le da el peso al capítulo, se ve en las escenas finales.
¿Cómo explicar los últimos momentos? La doble cara de este invitado parece el homenaje de este nueva historia, al comienzo de este anime. Ciel siendo subestimado, también forman parte de la "nueva versión", ya que no hay mejor manera introducir a Ciel. Un jovencito que es atendido en todas sus necesidades y que sin embargo es más hábil, más experimentado y más maltratado por la vida que todos aquellos hombres de
dinero.
El verdadero rostro de Sebastian, maligno e igualmente elegante que el que se presenta en el día a día. Su frialdad en contraste a la desesperación de aquel invitado.
Y esa última escena en la habitación en la que expresa sin reparos ni remordimientos el motivo de sus servicios y su devoción.
En esta escena también en tan solo esa última petición se expresa la soledad del protagonista. Que no cuenta con más compañía que un acuerdo que terminará destruyéndolo.
Simplemente perfectamente logrado. Y es que dentro de este anime uno de los elementos que mas me atraen es el ambiente victoriano, presentado de manera oscura y elegante.
El tema de los circos ambulantes, presentado al final, con un soundtrack circense en el desarrollo del episodio es sumamente inspirador y fascinante.
Sin embargo, en todo este ambiente y estética hay un defecto, que creo quienes están a cargo no deben permitirse. El modo en que se retrocedían las escenas para comenzar con flashbacks y revelaciones desentona completamente con el excelente trabajo ambiental.
Si bien me parece que lo estético termina siendo lo menos importante, en esta serie errores como esos son demasiado notorios.
En conclusión es un capítulo que no dice mucho, que no desarrolla y sin embargo promete muchísimo. A pesar de no leer el manga aún, me considero un amante de esta historia y me agradó volver a escuchar nuevamente aquella frase "Yes, my lord"
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